Bruno Basile
Bruno Basile | Fue director ejecutivo de Sumarse – Pacto Global Panamá.

Confianza, la moneda en curso de la sostenibilidad empresarial

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Por: Bruno Basile | [email protected]

Desde el inicio de la pandemia, la confianza en el sector empresarial ha escalado por encima de la de los gobiernos, las organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación. Además, las empresas son percibidas como las únicas organizaciones éticas y competentes ante los ojos de la opinión pública. Estos datos, recogidos en el Barómetro de la Confianza 2021 de Edelman, son solo la punta del iceberg de lo que se avecina en torno al entendimiento y manejo de la relación de las empresas con la sociedad y demás grupos de interés.

A pesar de ser un valor intangible, la confianza es la moneda en curso que nos permite establecer vínculos sostenibles en el tiempo. Cuando las empresas trabajan en su confianza, así mismo aumenta su capacidad para hacer crecer y evolucionar las relaciones con su cadena de valor, y la sociedad en su conjunto. Corporte Excellence define la confianza como “esa actitud que tienen nuestros stakeholders hacia nosotros y que, dependiendo de los comportamientos que perciban, puede ser positiva o negativa”. En otras palabras, en el mundo actual, la confianza es fundamental para un desarrollo empresarial responsable, integral y sostenible.

Según el informe de la consultora LLYC, titulado Cómo anticiparse a los nuevos riesgos reputacionales vinculados a ESG, un aumento de la confianza de la sociedad hacia las empresas y la economía puede provocar un incremento de los riesgos reputacionales en las empresas. “La lógica es sencilla: a un fuerte incremento de la confianza, como el que experimentamos en el momento actual, le sigue un fuerte incremento de los riesgos reputacionales si no se logra satisfacer las expectativas generadas en la opinión pública. A mayores expectativas, mayor probabilidad de defraudar dichas expectativas conforme avancen los próximos meses”, plantea el informe.

Para mitigar estos potenciales riesgos, las empresas deben mantener un liderazgo que les permita incorporar en sus modelos de negocio las tendencias que marcarán la diferencia en un futuro próximo, incluyendo la Responsabilidad Social Empresarial entendida como un modelo de gestión de los criterios Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG). Las empresas que consigan adaptarse exitosamente no solo obtendrán una ventaja competitiva, sino que serán capaces de promover una narrativa corporativa basada en hechos y en los intereses y preferencias de sus grupos de interés, generando un retorno positivo en términos de confianza y reputación.  .

***Las opiniones aquí expresadas son de exclusiva responsabilidad del autor, y pueden no coincidir con las del cuerpo editorial de esta revista o las de este gremio empresarial.

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