Cada vez son más las empresas que se suman a la tendencia de organizarse considerando en sus esquemas o procesos criterios fundamentales en materia de tecnología y sostenibilidad para elevar sus estándares con éxito y de manera integral.
Por: Malema De León | [email protected]
Diversos estudios han identificado la importancia de que las empresas integren, dentro de sus procesos, criterios basados en la sostenibilidad y el uso de herramientas tecnológicas para mejorar su gestión y proyectarse de manera positiva tanto en el medio ambiente como en la sociedad. Crecer exitosamente bajo los estándares ambientales, sociales y de gobernanza (ESG, por sus siglas en inglés) es la tendencia empresarial.
Anthesis Group, por ejemplo, una plataforma digital que impulsa el rendimiento sostenible, ha publicado artículos que hacen referencia a la importancia de desarrollar una cultura empresarial organizada tomando en cuenta las tendencias sobre sostenibilidad y tecnología, incluyendo las educativas, “para el éxito a largo plazo de una empresa, ya que fomenta la innovación, la adaptabilidad y la eficiencia, alinea a los empleados con objetivos estratégicos, mejora la reputación y atrae talento, impulsando la rentabilidad y la resiliencia en un entorno dinámico”.
De hecho, se afirma en estos escritos que la alineación con la sostenibilidad genera una reputación positiva, atrae a consumidores responsables y fortalece el compromiso con la comunidad. En cuanto a las tecnologías emergentes, estudios de la Fundación Dialnet han determinado que son un motor de cambio: “la IA o el IoT, no solo mejoran la eficiencia, sino que también son fundamentales para la innovación y para responder ágilmente a las fluctuaciones del mercado”.
En el artículo “La importancia del uso de las tecnologías en las organizaciones”, publicado en el sitio web de la fundación referida, se señala que “el uso de tecnologías en las organizaciones es fundamental para mejorar la eficiencia y la competitividad en un entorno empresarial en constante cambio”.
Se añade que implementar la digitalización permite automatizar procesos, optimizar la comunicación interna y externa, y facilitar la toma de decisiones basada en datos. “Esto no solo ahorra tiempo y recursos, sino que también aumenta la productividad de los empleados”. También, que las tecnologías emergentes, como la inteligencia artificial (IA) y el análisis de big data, ofrecen a las organizaciones la capacidad de personalizar servicios y anticipar las necesidades del cliente, traduciéndose en una mejor experiencia para él y en un aumento de su fidelidad.
Además, el uso de las tecnologías, según se desprende del artículo:
- Favorece el trabajo en equipo y fomenta la innovación, permitiendo que los empleados compartan ideas y soluciones de manera más efectiva;
- Mejora la capacidad de las organizaciones para adaptarse a cambios del mercado.
- Permite una rápida reconfiguración de estrategias y operaciones, asegurando que las empresas puedan responder a las nuevas demandas y desafíos.
- Potencia la innovación, la satisfacción del cliente y la adaptabilidad
Según lo publicado, en un mundo cada vez más digital, “aquellas organizaciones que invierten en tecnología estarán mejor posicionadas para enfrentar el futuro y alcanzar el éxito”.

Cultura organizacional
De acuerdo con Gustavo Manríque, Fundador de Semiotik, en su artículo Energizando la cultura organizacional, publicado en la Edición No.240 de Enlace Empresarial, expresó que “estamos entrando a una nueva era que no sólo incluye un acelerado proceso de transformación digital, sino también cambios de hábitos del consumidor y una evolución de los modelos de negocio”.
En su escrito, citó a Elena Granell, autora del libro Éxito Gerencial y Cultura Corporativa, cultura organizacional como “un conjunto de valores, creencias y conductas que han resultado exitosas para una empresa y es lógico pensar que cuando la estrategia de la organización y el entorno cambia, la cultura que antes había sido un apoyo puede convertirse en un obstáculo o freno”.
De igual forma, Manríque hizo referencia a un sondeo realizado por Stratego e IESA a más de 200 profesionales, mediante el cual se determinó que el 99% de los consultados coincidió en la necesidad de revisar la cultura corporativa de las organizaciones para responder a las exigencias futuras. Y que el 91% considera necesario replantear el propósito de su organización en función de las expectativas sociales actuales y futuras sobre el desempeño empresarial y las marcas.
Por su parte, Leopoldo Ruiz, director regional para Latinoamérica de
Axis Communications, en su artículo La importancia de la cultura organizacional para el crecimiento de las empresas (Julio 2024), opinó que “una cultura organizacional solida no solo beneficia a los empleados, sino que también fortalece a la empresa en su conjunto porque sirve como un gran atractivo para el talento. Ayuda a las organizaciones a atraer y a retener a empleados de alto rendimiento. Al centrarse en la innovación, la formación continua, el crecimiento profesional, el equilibrio vida-trabajo y la diversidad, las empresas aseguran que sus colaboradores estén motivados y preparados para enfrentar cualquier desafío dentro de la empresa y en sus vidas cotidianas”.
Para Myrja Ceballos, consultora de negocios y emprendimiento sostenible, en un artículo de opinión exclusivo para la presente edición de Enlace Empresarial, manifestó que el futuro pertenece a las empresas que entienden que la tecnología sin propósito sostenible es vacía, y que la sostenibilidad sin innovación tecnológica es limitada. “La convergencia de ambos elementos no es solo una estrategia inteligente, es la única estrategia viable para construir empresas prósperas, resilientes y con impacto positivo duradero”.
Sondeo empresarial
Para esta edición No. 257, Revista Enlace Empresarial consultó a alguno ejecutivos de empresas afiliadas a la Cámara de Comercio Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP) para conocer cómo han alineados sus esquemas a las nuevas tendencias relacionadas con los criterios de sostenibilidad y uso de tecnologías como parte de su cultura organizacional.
Loney Armijo, managing director de Arcos Dorados Panamá, indicó que esta empresa entiende la sostenibilidad “como un eje transversal que moldea nuestra cultura organizacional y define la forma en que operamos y nos vinculamos con la comunidad” Enfoca sus esfuerzos en integrar una visión de largo plazo que combine desarrollo económico, inclusión social y responsabilidad ambiental. “Elevar estos estándares sostenibles e innovadores no es una opción, sino una necesidad que nos permite avanzar, crecer junto a nuestra empresa y generar valor compartido para la sociedad”, señaló.
Agregó que para esta organización empresarial la tecnología y la sostenibilidad son catalizadores de cambio que fortalecen la identidad corporativa y el sentido de propósito de sus equipos. “Hemos incorporado prácticas tangibles como la separación de residuos, el uso de materiales reciclados, la eficiencia energética, estaciones de carga para vehículos eléctricos y sistemas de recolección de agua de lluvia. Estas acciones optimizan nuestros procesos e inspiran a nuestros colaboradores a convertirse en agentes de cambio”.
Armijo subrayó que una cultura organizacional sólida se construye sobre la coherencia. “Lo que proyectamos hacia afuera debe vivirse dentro de la organización. Por ello, capacitamos a nuestros equipos para comprender, aplicar y multiplicar nuestras iniciativas, asegurando que cada innovación tecnológica y cada proyecto sostenible se traduzcan en un mejor servicio, mayor eficiencia y un impacto positivo y tangible en la comunidad”, explicó.
Entre los enfoques aplicados por esta empresa, detalló, está la estrategia ‘Receta del Futuro’, que articula acciones concretas para generar impacto positivo en sus operaciones y en las comunidades donde está presente. Bajo este marco, emplea el modelo McDonald’s 2.0, incorporando sensores de movimiento, iluminación LED, aire acondicionado de bajo consumo, sistemas de reutilización de agua y separación de residuos. Se incluyen remodelaciones de locales con iniciativas de sostenibilidad integradas.
En el ámbito tecnológico, la empresa ha desarrollado un ecosistema digital pensado para ofrecer experiencias más prácticas, personalizadas y convenientes con la introducción de kioscos digitales en 2021, y en 2022, lanzó la aplicación ‘Pide y Pasa’, que combina rapidez, personalización y múltiples métodos de pago para promover la inclusión financiera digital.
Esas y otras iniciativas, indicó Armijo, son “transformaciones que replantean nuestro modelo empresarial. Al integrar tecnología y sostenibilidad, logramos optimizar procesos, reducir nuestro impacto ambiental, crear nuevas oportunidades laborales y fortalecer la relación con nuestros clientes. Así, reafirmamos que la innovación responsable es la vía para un crecimiento sostenible y una cultura organizacional preparada para el futuro”, acotó.
Por su parte, Laura Alfaro, directora de Sostenibilidad de Grupo Melo, consultada sobre la importancia de elevar y mantener la cultura organizacional cumpliendo con los estándares en cuanto a tecnología y sostenibilidad, explicó que esta organización empresarial, ha construido su cultura sólida y coherente sobre el compromiso con el país, el respeto por las personas y el enfoque en la mejora continua.
“La sostenibilidad en nuestra operación es una brújula que orienta el quehacer diario. Nuestra estrategia se estructura en cinco ejes que abarcan desde la gestión del negocio y el bienestar laboral, hasta la eficiencia operacional y la experiencia del cliente. Esta mirada transversal nos permite hacer tangible el propósito en cada acción, alineando cultura y desempeño en la misma dirección”, expresó Alfaro.
En cuanto a la tecnología, indicó que su uso en esta empresa actúa como un catalizador. “A través de herramientas digitales hemos logrado mejorar la trazabilidad, automatizar procesos operativos clave, fortalecer la gestión de residuos y afianzar la calidad en nuestras operaciones agroindustriales. Incorporamos soluciones que aportan eficiencia y conocimiento en tiempo real, y que nos ayudan a sostener una cultura que evoluciona con propósito y responde de forma ágil a las nuevas exigencias del entorno”, describió.
De acuerdo con la ejecutiva, esta compañía ha ejecutado inversiones orientadas a reforzar su eficiencia operativa y logística, ampliar la cobertura nacional y optimizar la infraestructura en distintas unidades de negocio. “Parte esencial de esta transformación ha sido la inversión sostenida en energía renovable, alineada con nuestra meta de alcanzar un 70% de cobertura energética limpia para 2026. A la fecha, se ha destinado más de B/.6.1 millones a proyectos fotovoltaicos”, precisó.
De igual forma, aseguró que “haber apostado desde 2019 por operar con energía 100% renovable no solo ha sido una decisión responsable, sino estratégicamente acertada desde lo operativo, financiero y ambiental. Este enfoque nos ha permitido reducir costos estructurales, optimizar procesos productivos y fortalecer nuestra resiliencia energética”.
Alfaro manifestó que la sostenibilidad ha evolucionado como un eje neurálgico de nuestro modelo de negocio. “Hoy hablamos de una forma de hacer empresa que no separa la eficiencia de la responsabilidad, ni el crecimiento del impacto. Esta integralidad nos permite ser más competitivos”, agregó.
Por otro lado, en SONDA Panamá, la cultura organizacional es un motor estratégico que alinea al talento humano con los desafíos actuales en sostenibilidad y tecnología. Así lo expresó, Víctor Betancourt, su gerente general para Panamá – Guatemala, agregando que este enfoque ha permitido que la compañía compense el 100% de su huella de carbono en Alcances 1 y 2 desde el inicio del programa Reduce Tu Huella Corporativo del Ministerio de Ambiente (MiAmbiente) de Panamá.
Betancourt explicó que, según su Informe GEI 2023, las emisiones alcanzaron 135,89 tCO₂e, con el consumo eléctrico representando el 80,78% del total, incremento asociado a la expansión operativa, pero manteniendo una tendencia de reducción.
De acuerdo con el ejecutivo, la compañía ha implementado acciones concretas como la migración a iluminación LED, modernización de sistemas de aire acondicionado, transición hacia una flota más sostenible y programas internos de eficiencia energética. A ello se suman campañas de concienciación para colaboradores, clientes y proveedores, fomentando una red que comparte la visión de sostenibilidad a largo plazo.
A lo anterior se suma, la certificación de “Carbono Neutral”, otorgada por la consultora Versa, y la compensación de emisiones mediante el proyecto hidroeléctrico ‘El Edén’, “los cuales son hitos que respaldan esta cultura, donde la responsabilidad ambiental no es un área aislada, sino un valor transversal que define la forma de hacer negocios”.
SONDA Panamá, argumentó Betancourt, ha adoptado tendencias que integran sostenibilidad y transformación digital como ejes de competitividad y responsabilidad corporativa. En el ámbito ambiental, se adhirió a la Declaratoria “Las 50 Primeras” de MiAmbiente, con el compromiso de alcanzar ‘la carbono neutralidad’ antes de 2050. Auditada por la empresa consultora TREEGACY, ha reducido más del 53% de sus emisiones, fortaleciendo procesos más eficientes y transparentes.
Además, con la entrega del Sello de Neutralidad por parte de MiAmbiente, en agosto de 2025, tras completar exitosamente el cuarto ciclo del programa ‘Reduce Tu Huella Corporativo – Carbono’, se reconoció a SONDA como una de las organizaciones que asumen el reto de medir, reportar y mitigar sus emisiones con estándares internacionales. “Este hito refuerza su estrategia de gobernanza ambiental y su liderazgo en prácticas empresariales responsables en toda su operación”, puntualizó el ejecutivo.
En cuanto a tecnología, la empresa ha impulsado soluciones innovadoras con impacto positivo, destacando la implementación de pagos sin contacto EMV en el Metro de Panamá, que optimiza la experiencia de viaje, reduce tiempos de espera y fomenta la inclusión digital. También ha fortalecido sus capacidades en ciberseguridad y analítica de datos, alineando estas iniciativas con criterios de sostenibilidad.
“Este enfoque ha replanteado el modelo empresarial, priorizando la innovación que genera valor económico, social y ambiental. Los indicadores ambientales verificados por terceros, la integración de criterios ESG en sus operaciones y las alianzas educativas para desarrollar talento local son prueba de un modelo adaptado a las tendencias globales y a las metas climáticas de Panamá”, señaló Betancourt.
Todas estas prácticas adoptadas por las organizaciones empresariales consultadas denotan esa vinculación estrecha entre la sostenibilidad y el uso de herramientas tecnológicas, permitiéndoles desarrollar su capacidad de gestión y elevar con ello sus niveles de innovación, productividad y competitividad de cara a los desafíos presentes y futuros.