La información actualizada sobre el entorno en que se desenvuelven, permite a las empresas prepararse para enfrentar los retos del mañana.

ADOPCIÓN EFICIENTE DE LAS EMPRESAS A ENTORNOS FUTUROS COMPLEJOS

0 Shares
0
0
0
0

Entre otros aspectos, un estudio profundiza en los desafíos de las organizaciones empresariales, y en sus soluciones, desde la óptica que ofrecen los ‘estudios de futuros’.

Por: Malema De León | [email protected]

Cada organización debe conocerse lo suficiente y comprender su entorno para ajustar lo que hay que ajustar y mantener lo que es preciso. Esta capacidad para discernir entre lo que ha de modificarse y lo que ha de permanecer, contribuye al coeficiente de preparación frente al cambio, según se desprende del el informe ‘Pensar en el futuro para gestionar el presente.

El informe es el resultado de una iniciativa de LLYC, consultora global de comunicación, marketing y asuntos públicos, junto con CENTRO, institución de educación superior especializada en economía creativa, bajo la premisa que “los estudios de futuros contribuyen a sortear de mejor manera el cambio y la turbulencia incremental en la que vivimos”.

Al respecto, David González Natal, socio y director general de la Región Norte de LLYC y coautor del estudio, indicó que los desafíos a los que se ven enfrentadas hoy en día, las compañías adquieren otra connotación “cuando son observados por el campo de conocimiento de los estudios de futuros”.

Por su parte, Karla Paniagua, coordinadora de Estudios de futuros en CENTRO, y también coautora del estudio, explicó que “Con frecuencia, las empresas declaran: no podemos pensar en el futuro, estamos absorbidos por la operación, y esto no podría ser más cierto. Es una manifestación del síndrome del presente que compromete el trabajo estratégico de organizaciones de todos los tamaños y en todos los sectores, en donde se vuelve imposible para los equipos el imaginarse qué podría pasar con la compañía y su entorno si las cosas salen bien, si las cosas salen más o menos o si llega el kraken”.

De acuerdo con lo señalado, estos tipos de estudios pueden apoyar a una organización a explorar los futuros posibles de la misma y a diseñar acciones de cambio que puedan influir en ese probable futuro, mediante estos pensamientos:

  • El pensamiento sistémico hace posible la identificación de las relaciones entre las partes en un contexto dado. Por ejemplo, la correlación entre el espacio aéreo, la logística, los fenómenos naturales y la mediación humana para lograr que un avión despegue o aterrice.
  • El pensamiento catedral, que permite idear y ejecutar proyectos de largo plazo, esto es, planear y tomar decisiones pensando en su posible impacto a 10, 50, 100 años o más.
  • La creatividad hace posible la identificación de problemas y sus posibles soluciones con base en el ingenio, que es esencial para hacer que una organización sobreviva y prospere en tiempos de gran incertidumbre.

Algunos desafíos actuales de las compañías

El informe menciona tres grandes desafíos actuales de las compañías, cuya solución puede verse favorecida por esta visión de los estudios de futuros.

  • El rol de los líderes como motor del crecimiento. Una organización cuyos líderes han adquirido y desarrollado el conjunto de habilidades de los estudios de futuros, en primera instancia para sí mismos, y más allá para sus equipos y aquellas personas de su esfera de influencia, está mejor preparada para la supervivencia frente al cambio.
  • Convertir la transformación en un activo reputacional. La capacidad de adaptación hace posible la supervivencia, pero cambiar es muy incómodo y cuesta. Aquellas empresas que puedan navegar entre los factores del pasado, del presente y del futuro, podrán sobrevivir a esta fricción de mejor manera.
  • Navegar en un contexto complejo y polarizado. Las organizaciones elásticas están mejor preparadas para gestionar conocimiento, navegar los entornos altamente turbulentos y discernir entre los discursos y las realidades polarizadas.

De manera concluyente, los investigadores sostienen que el primer paso para que “el presente incierto, polarizado y cambiante no consuma a las empresas y éstas puedan navegarlo de mejor forma”, es incrementar su coeficiente de preparación para el futuro.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

You May Also Like