Desde diversos escenarios, se fomenta el espíritu emprendedor para afrontar el entorno socioeconómico actual. Se trata de iniciativas en el ámbito local y regional, ligadas a la formación académica y profesional, así como a las oportunidades de financiamiento, desarrollando competencias y habilidades, entre otros incentivos, para alcanzar las metas con éxito.
Por: Malema De León | [email protected]
“La formación al emprendimiento crea la plataforma de ideas creativas e innovadoras que precisamos para encontrar el éxito en el siglo XXI. Es también un modo de fomentar la educación de personas resilientes y dispuestas a aprender continuamente, para responder a las alteraciones sociales, económicas y ecológicas del mundo”. Tales líneas introductorias se desprenden de una guía práctica del Centro Internacional para la Enseñanza y Formación Técnica y Profesional de UNESCO, en la que se destaca la importancia de la información al emprendimiento.
Se añade en el documento de 2021, en el que se explican los componentes clave de un ecosistema de formación al emprendimiento, además de otros conceptos, que el incremento de la demografía juvenil, el aumento del desempleo en numerosos países, los cambios en el mercado de empleo y la economía debidos a la evolución tecnológica son algunas de las razones por las que “se deben dotar a las futuras generaciones de competencias y mentalidades emprendedoras que les permitan responder a un mundo en continuo cambio”.
Entre las conclusiones de esta guía se menciona, como factor esencial para introducir con éxito la formación al emprendimiento en la enseñanza, contactar e intercambiar ideas con otras entidades educativas y agentes del emprendimiento, ya sea a nivel de país o a escala internacional.
Emprendimiento e innovación
En condiciones adecuadas, la innovación y el emprendimiento contribuyen a crear empleo; Aumentar productividad y crecimiento económico; propiciar transformaciones socioeconómicas; reducción de la pobreza / formalización de empresa, según organismos de Naciones Unidas como la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Entre los instrumentos de políticas para apoyar emprendimientos innovadores que se promueven están: financiamiento, culturas y habilidades empresariales, capital humano, mercados, conocimiento, y ambiente regulatorio.
Por su parte, la Secretaría General del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA, publicó el año pasado, un informe sobre el emprendimiento y la innovación, como aspectos fundamentales de desarrollo económico post pandemia. El documento (ver aquí detalles), resalta la evolución y el escenario en el que se han desenvuelto las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) en la región.
Ambos elementos, el emprendimiento y la innovación, son “asignaturas pendientes desde una perspectiva integral”, según establece el informe. Asimismo, advierte la necesidad de mejorar la productividad empresarial en aspectos como capacidad de gestión, productividad de empleo y diversificación que permita impulsar el nivel de competitividad.
Como parte del “Observatorio regional de competitividad e innovación”, el estudio señala que las tendencias en los diferentes indicadores de competitividad para las MiPymes en la región se mantienen relativamente constantes. Ante ello, establece que “es positivo no decrecer, pero tampoco resulta tan positivo no evolucionar en períodos medianos”.
También, que la región ha tenido un mejor desempeño en el área de desarrollo empresarial, con una brecha media de poco más de 26 puntos con respecto a los mejores estándares a nivel mundial. “La apertura de negocio es la variable más cercana al estándar internacional y el pago de impuestos, la más alejada”, se destaca.
Por otra parte, el informe señala que los principales ámbitos de mejora detectados están relacionados con la formación de los cuadros directivos de las empresas, la cualificación de los y las trabajadoras, su adecuación a las características del mercado laboral de los países y la productividad para que se corresponda y mejore los niveles salariales existentes. Al respecto, el secretario general del SICA, Vinicio Cerezo, establece en la Carta por el Futuro de la Integración Centroamericana que “se deben fortalecer las bases para una economía de futuro, caracterizada por una mayor competitividad que sea inclusiva y solidaria, que permita mayor prosperidad para los pueblos, que favorezca la diversificación del tejido empresarial y cambios estructurales en los modelos productivos para generar más y mejores empleos de calidad”.
El apoyo a la MiPymes formó parte del Plan de Contingencia Regional frente al Coronavirus, puesto en marcha por los ocho países miembros del SICA el año pasado. Esta secretaría, a través de sus instancias especializadas, dispone de un monto aproximado de US$1,630,963.54, para MiPymes de municipios fronterizos priorizados de Guatemala, El Salvador, Honduras, Costa Rica y Panamá.
Desarrollo del emprendimiento en Panamá
De acuerdo con pronunciamiento de la Autoridad de la Micro, Mediana y Pequeña Empresa (Ampyme), “Panamá tiene grandes posibilidades de desarrollar el emprendimiento, para ello, es imprescindible generar condiciones sistémicas favorables para la creación y desarrollo de nuevas empresas competitivas, con potencial y proyección de crecimiento”. Uno de los indicadores que sustenta esta afirmación es que de acuerdo con el Monitor Global de Emprendimiento 2018 (GEM, por sus siglas en inglés), el 63% de los emprendedores, en etapa de Actividad Emprendedora Temprana (TEA, por sus siglas en inglés), está impulsado sólo por oportunidad.
“Es una realidad que tanto el emprendimiento como el sector MIPYME juegan un papel determinante en el desarrollo”, afirma la Ampyme que ha desarrollado varias guías relacionadas, entre éstas, la Guía Rápida para Emprendedores, y se incluyen varios volúmenes: el primero, “De Emprendedor a Empresario”; y el segundo, “El ABC del Emprendedor”, los cuales guían al emprendedor en el arduo y costoso proceso de creación y puesta en marcha de nuevas iniciativas empresariales.
Perfil del emprendedor panameño
Según estudio de Ampyme, un emprendedor de hoy en Panamá se podría definir como una persona entre 25 y 44 años, con una educación académica mediana, de nivel socioeconómico medio, que reside en la provincia de Panamá y se dedica al comercio independiente en la gran mayoría de los casos.
Del informe Perfil del emprendedor panameño (2020), se desprende que del tamaño total del universo de emprendedores o ecosistema empresarial local calculado por el GEM 2019/2020, un estudio que cada año elaboran Babson College y London Business School, el 28% de la población entre 18 y 64 años que habita en Panamá exceptuando comarcas y Darién, es decir, 28 de cada 100 panameños en edad productiva, considera oportuno emprender o tiene menos de 3.5 años emprendiendo.
El 35% de los emprendedores en el GEM 2019/2020 son de nivel socioeconómico medio y un 28% Alto, una proporción algo más significativa de lo que podría esperarse. En las provincias de Panamá y Colón se concentra el 66% de los emprendedores, en las provincias centrales el 16% de los emprendedores y en el occidente del país (Veraguas, Chiriquí y Bocas del Toro) la proporción es del 17% del total. En cuanto la ubicación de los emprendedores se observa un crecimiento relativo de población emprendedora de las provincias centrales al comparar contra la medición GEM 2018/2019.
Al igual que en otros 70 países, en Panamá desde hace más de 10 años se hace este estudio de la actividad emprendedora local, gracias a la alianza entre el Centro de Innovación de la Ciudad del Saber, el Instituto de Estudios Superiores (IESA) y AMPYME.
Formación profesional empresarial
A propósito de este tipo de acciones, hace un año,la Cámara de Comercio, Industrias y Agricultura de Panamá (CCIAP) presentó oficialmente su Centro de Formación Profesional y Desarrollo Empresarial, que tiene entre sus objetivos promover el desarrollo integral y sostenible, tanto de los individuos como de las empresas; fortalecer la competitividad; aumentar la productividad; crear redes profesionales que promuevan el crecimiento común y, sobre todo, apoyar el espíritu empresarial y el proceso de formalización de las iniciativas de negocios de los emprendedores.
Otros de los objetivos del centro es ofrecer herramientas para el acceso al financiamiento a los emprendedores, así como guiar en el proceso (mentoría), formalizar empresas y ofrecer soluciones tecnológicas. Sobre el particular, altos ejecutivos del gremio empresarial han destacado la importancia de fomentar iniciativas para lograr una educación de calidad, considerando que es la mayor de las prioridades para poder evolucionar hacia el desarrollo.
“En la educación media y superior panameña existe una de las mayores brechas para la formación, tomando en cuenta que 62 de cada 100 estudiantes terminan la educación escolar y 10 de cada 100 alumnos terminan la universidad. Por lo que hay un 52% de los jóvenes que no logra una formación profesional para las necesidades del mercado laboral”, indicó entonces, durante el acto de lanzamiento del mencionado centro de formación profesional, el presidente de la CCIAP, Jose Ramón Icaza.
En tanto, Gastón Faraudo III, director del Grupo No.15 de Desarrollo Humano de la CCIAP, destacó que el país, hoy más que nunca, necesita de un capital humano formado hacia las exigencias que el mercado laboral requiere de cara a una reactivación económica efectiva y con perspectivas a largo plazo.
“La educación ha sido duramente golpeada y afectada por las medidas adoptadas de cara a enfrentar la pandemia del COVID-19 y aún seguimos en la lucha por el retorno a las aulas; esto tendrá un impacto en los futuros profesionales, por lo que este lanzamiento se presenta como una ventana de oportunidad”, sustentó.
Este nuevo centro centra sus ofertas tanto para la membresía de la CCIAP como para el público en general, enfocando su primer eje al desarrollo de habilidades blandas y capacitaciones en funciones dirigidas a nivel técnico y administrativo. Un segundo eje busca desarrollar la educación continua en el nivel gerencial y ejecutivo; con programas dirigidos a la comunicación digital, herramientas e Información para el negocio, lealtad, Desarrollo Organizacional, diplomados y cursos certificados, liderazgo, neuro coaching, competencias técnicas, educación financiera, comunicación, imagen y proyección profesional. Y un tercer eje enfocado a la celebración de congresos con expositores nacionales e internacionales.
Para la puesta en marcha de este centro, se firmaron convenios de cooperación con instituciones nacionales e internacionales para transferencia de conocimientos, capacitaciones y temas didácticos, para promover el desarrollo profesional del recurso humano de las empresas; así como, emprendedores y empresarios de la MiPyMES que requieren adquirir más competencias para potenciar sus iniciativas de negocio. Es así como la CCIAP firmó convenios, entre otros, con la Caja de Ahorros, Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano (INADEH), ITSE, Universidad Tecnológica de Panamá, Florida State University, Quality Leadership University, ADEN International Business School, Universidad Santander, Instituto Técnico Don Bosco y Universidad Autónoma de Guadalajara (México).
Adicionalmente, acuerdos TIGO y Manpower Panamá, de igual forma, para la actualización de información y orientar la oferta de capacitaciones hacia temas que atiendan las necesidades del sector privado, en cuanto a desarrollo de habilidades y competencias.
Respaldo a los proyectos innovadores
En Panamá, el año pasado, Ciudad del Saber hizo del Estudio Global de Emprendimiento (GEM), el cual reveló que 7 de cada 10 personas con intención de emprender un negocio vieron influenciadas sus decisiones por la pandemia de COVID19. También informó de los resultados de un estudio similar en el que se revela que el 63% de los emprendedores está impulsado solo por oportunidad; un 88% se concentra en comercio y servicios; y el 79% no considera sus productos o servicios como innovadores.
Se afirma que “muchos emprendedores dedican meses y años tratando de diseñar una solución perfecta que se convierta en la idea más innovadora para el mercado. No obstante, algunas de estas propuestas no llegan a ver la luz por su incapacidad para resolver problemas reales de los consumidores actuales”.
Ante el planteamiento que se hace de tales resultados, nace el Programa Ideatones CAPATEC, programa que tiene como objetivo principal poner en práctica el concepto de innovación abierta siendo un puente para conectar necesidades reales de empresas, con soluciones diseñadas por emprendedores, llevadas a cabo con metodologías de diseño comprobadas y avaladas por expertos de la industria.
Para el desarrollo de esta iniciativa, dos miembros de Ciudad del Saber, CAPATEC y Escala Latam, con el financiamiento del BID LAB han diseñado un ecosistema en el que participan distintos actores del gobierno, sector privado, instituciones educativas, innovadores, mentores y expertos con la finalidad de abrir camino al emprendimiento digital panameño en las áreas de finanzas y logística.
Las empresas involucradas mejor conocidas como “empresas anclas” participan dando a conocer los problemas de su industria que deseen resolver. Asimismo, adquieren el compromiso de ser un mentor, guía y un posible socio o inversionista del emprendedor. Por su parte los emprendedores tienen la oportunidad de reconocer, analizar, comprender y proponer soluciones para resolver los retos de las empresas anclas Todo esto acompañado de talleres con expertos de Silicon Valley y formando parte del programa FastTrack MVP dictado por Escala Latam en temas relacionados a: Innovación abierta, Design Thinking, aplicación de metodología Lean, elaboración de “pitch”.
Por su parte, el apoyo al desarrollo de proyectos innovadores para la reactivación económica ha sido evidenciado en el país. Un ejemplo lo da la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt), a través de su Dirección de Innovación Empresarial, que en marzo pasado, que anunció en marzo pasado la convocatoria pública Innovatec Panamá 2022, donde participan estudiantes, emprendedores, asociaciones de interés público y personas jurídicas. El propósito es financiar proyectos de emprendimiento que estén alineados con los sectores prioritarios establecidos en el Plan Estratégico Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (PENCYT) 2019-2024.
Los proyectos deben tener un potencial de crecimiento a nivel nacional e internacional, plantear la comercialización de productos o servicios innovadores, y que puedan generar un impacto económico, social o ambiental en el país.
También, Caja de Ahorros y CCIAP han firmado convenios para desarrollar programas de financiamiento para las pequeñas y medianas empresas. El gremio empresarial y los ejecutivos de la entidad bancaria destacaron que tiene la finalidad de impulsar un apoyo efectivo a su membresía, así como a otros empresarios y emprendedores afectados por la crisis sanitaria y socioeconómica. En esa línea, se organizó el Webinar “Financiamiento para Pymes: Trámites y requisitos”, que contó con la participación cerca de 600 empresas afiliadas.
Por su parte, Tigo Panamá, en seguimiento de su larga trayectoria de apoyo al sector empresarial y a los emprendedores, renueva y fortalece sus acciones a través de la firma de nuevos convenios con Canal de Empresarias de la Fundación Ciudad del Saber. Estos convenios permitirán impactar a más mujeres emprendedoras a través de la estructura de programas como Emprendedores en Acción y Conectadas.
“Ambas plataformas tienen como objetivo. La formación y empoderamiento del sector empresarial y los emprendedores con la visión de crear capacidades que les permitan a sus líderes desarrollar y fortalecer sus negocios” manifestó Vanya Paola Carrera, directora de Responsabilidad Social Corporativa de esta compañía.
A su vez, Madelaine Leignadier, Mentora en Vídeo Marketing y Estrategia Digital, comentó: “Hoy más que nunca urge seguir capacitando y ofreciendo actualizaciones continuas a nuestros emprendedores, las herramientas digitales y la comunicación van de la mano. Gracias a esta alianza esperamos impactar a un numeroso grupo de mujeres y sus negocios”.
Competencias y habilidades
El emprendimiento es un tema que se hace, cada vez más, presente en la propuesta educativa de los centros educativos y académicos. De hecho, universidades locales e internacionales, destacan el desarrollo de una mente emprendedora orientada al éxito, “capaz de tener iniciativa, creatividad, autoconfianza y entusiasmo”. Entre las competencias para desarrollar exitosamente el emprendimiento, están:
- Búsqueda y aprovechamiento de oportunidades: La iniciativa y la proactividad resultan primordiales para esto.
- Asumir riesgos calculados: Para llevar una idea a la acción es imprescindible saber tomar riesgos, evaluar las contrapartidas y las recompensas. Enfrentar al fracaso.
- Pensamiento crítico y creativo: Para contribuir con nuevas ideas y decidir correctamente son fundamentales la creatividad y la innovación, así como el pensamiento crítico para desarrollar la capacidad de análisis y aplicar la lógica.
- Liderazgo: Es clave para organizar el trabajo propio y el del equipo, y adaptarlo al modelo de negocio y a la personalidad del emprendedor.
- Autoconfianza y autoeficiencia: Es importante sentir seguridad y tener confianza en las propias capacidades para afrontar los retos.
A tales competencias y habilidades, se añaden otros valores como planificación, persistencia, resiliencia y a adaptación a los cambios, comunicación, capacidad de negociar; y ética.