Por: Victor Betancourt | *Gerente General de Sonda, S.A. | Email: [email protected]
En el ámbito mundial, las plataformas digitales se han convertido en el modelo de negocio de mayor crecimiento, dejando atrás la linealidad por lo exponencial, en cuanto a la rapidez de adopción, expansión y generación de valor.
Hemos sido testigos del surgimiento de la economía de plataformas, apuntalada por empresas como Amazon, Airbnb y Uber, las cuales han traído gran disrupción generando productividad, reduciendo costos e ineficiencias y creando nuevos mercados.
Las también denominadas soluciones online, corazón de este modelo de negocios, se crean para permitir la integración de diferentes actores y capacidades que participan en la generación de valor, en un ámbito o propósito que sirve a grandes segmentos de población o de la economía. Además, facilitan la conformación de “ecosistemas de plataforma”, en los cuales el valor generado por uno de los miembros influencia el valor creado por el resto, potenciándolo a niveles que en forma individual no sería posible.
Pese a que pasan desapercibidos, muchos ámbitos de nuestra vida diaria están estructurados como ecosistemas de plataforma, donde un núcleo estable media la relación entre una amplia gama de participantes y posibles usuarios finales.
Uno de estos ecosistemas se da lugar en la ciudad de Panamá, a través del sistema de transporte que ha facilitado, en los últimos ocho años, el uso del servicio por parte de los ciudadanos a través de una tarjeta especializada.
El ecosistema conformado por los diferentes participantes de la Plataforma Digital de Transporte de Panamá ha alcanzado la madurez, y actualmente permite una experiencia integral para el usuario final, quien dispone de diversas opciones para la recarga de sus tarjetas de transporte, de acuerdo con sus medios y estilo de vida, convirtiendo la movilización combinada de rutas de buses y líneas de Metro en algo cotidiano y sin preocupaciones.
Para lograr el desarrollo de esta plataforma se han dispuesto integraciones en línea en los que participan autoridades, operadores, red de carga, la banca, red de pagos electrónicos, terminales de transporte y usuarios finales. Esto da paso a la evolución del sistema hacia el Transporte 3.0, el cual permitirá que más jugadores se acoplen y proporcionen nuevos métodos de pago y recarga, aplicaciones, generación de códigos QR, y otras innovaciones que permitan a los usuarios acceder al sistema integrado de transporte con la actual tarjeta, con tarjetas bancarias u otros medios.
Sin duda, Panamá se ha convertido en un eje referencial de evolución en materia de transporte gracias a toda su experiencia, lo que le ha abierto las puertas en Centroamérica para replicar este logro. En la actualidad, profesionales panameños, altamente capacitados, están llevando este sistema para implementar la nueva visión del Transporte 3.0 en Guatemala.
Panamá mira hacia el futuro, y con su plataforma digital en materia de transporte, se prepara para seguir evolucionando, y con ello, seguir contribuyendo al liderazgo de la región y la calidad de vida de sus ciudadanos.