Por: Michelle Arias Tapia | Contacto: [email protected]
En los últimos años, Panamá se ha consolidado como un destino turístico de gran prestigio en la región, atrayendo visitantes de todo el mundo gracias a su riqueza cultural, impresionantes paisajes naturales y una amplia variedad de actividades turísticas. Actualmente, el turismo en Panamá representa el 10% del PIB nacional y el país ha sido reconocido como uno de los destinos emergentes más prometedores de América Latina.
Para continuar su crecimiento y posicionarse entre los principales destinos turísticos a nivel global, es esencial adoptar una estrategia país enfocada desde una perspectiva comercial, acompañada de una estructura legal sólida que potencie sus fortalezas y supere los desafíos del sector. La planificación estratégica en turismo es fundamental, ya que se proyecta un crecimiento sostenido, con un incremento del 5% en la llegada de visitantes internacionales para el 2025.
Un aspecto clave para sostener estas proyecciones es la consolidación de la marca país como un destino turístico de referencia mundial. Esta marca ha experimentado muchos cambios bajo diferentes gobiernos, lo que subraya la necesidad de una legislación clara y actualizada que fomente la inversión en infraestructuras turísticas, tanto en la ciudad de Panamá como en otras áreas del país. Además, esta legislación debe proteger el patrimonio natural y cultural, al tiempo que promueve una competencia justa entre los actores del sector.
Los abogados especializados en derecho turístico y comercial desempeñan un papel crucial en garantizar el cumplimiento de las normativas vigentes, así como en facilitar la inversión en proyectos turísticos mediante la presentación de propuestas y alianzas estratégicas que protejan los intereses de todas las partes involucradas. La colaboración entre el sector público y privado será determinante para promover la sostenibilidad y la responsabilidad social, asegurando un desarrollo sostenible a largo plazo.
Uno de los grandes retos de Panamá de cara al 2025 es consolidar una marca país sólida y duradera que trascienda fronteras y se posicione de manera efectiva en el ámbito internacional. Es imprescindible seguir promoviendo iniciativas que mejoren la ocupación hotelera y la calidad de los servicios turísticos. La innovación en productos turísticos, la diversificación de la oferta y la adopción de tecnologías disruptivas serán elementos clave para diferenciar a Panamá como un destino único y atractivo para los viajeros de todo el mundo.
Se estima que el gasto promedio por turista en Panamá aumentará un 7% para 2025. El gobierno ha puesto especial atención en incrementar la ocupación hotelera, que actualmente se sitúa en el 50%, a través de estrategias que incluyen la promoción de centros de convenciones y la creación de alianzas con aerolíneas para atraer más turistas al país.
Para lograr este incremento en la ocupación hotelera y fomentar un mayor gasto por turista, es fundamental implementar una serie de estrategias efectivas. Entre ellas, se destaca la diversificación de la oferta turística, promoviendo tanto destinos tradicionales como lugares menos conocidos, pero igualmente atractivos. Asimismo, es crucial mejorar la infraestructura turística, ofreciendo instalaciones modernas y servicios de calidad que satisfagan las expectativas de los viajeros. La capacitación continua del personal hotelero también es esencial para competir con destinos consolidados como México y República Dominicana. Otro enfoque importante es establecer alianzas con aerolíneas y agencias de viajes para crear paquetes turísticos atractivos que motiven a los visitantes a prolongar su estancia y aumentar su gasto en actividades como ocio, gastronomía y compras. Además, es necesario fortalecer las campañas de marketing digital y la presencia en redes sociales para ampliar el alcance y visibilidad del destino. Todas estas estrategias, sumadas a nuevos desarrollos como la apertura de un puerto de cruceros en la ciudad, pueden posicionar a Panamá como un destino turístico altamente competitivo.
En conclusión, el éxito del sector turístico de Panamá en los próximos años dependerá de una visión estratégica a largo plazo, basada en alianzas sólidas y un enfoque integral que aborde aspectos legales, comerciales, culturales y medioambientales. Con una legislación robusta, profesionales capacitados y un compromiso con la sostenibilidad, Panamá tiene el potencial de consolidarse como un destino turístico de clase mundial, desarrollando estrategias nuevas en el eco turismo y la eco pesca, capaz de cautivar a viajeros de todas partes con la belleza y diversidad de sus paisajes y cultura. El futuro turístico de Panamá es prometedor, y su éxito estará marcado por la capacidad de innovación y mejora continua para ofrecer experiencias inolvidables a los visitantes.
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